Esta glorieta en particular siempre ha sido un dolor de cabeza para la administración en cuanto a movilidad, pues interjecciona los ejes de San Juan y La 80, conectando el centro con la parte centro occidental de la ciudad a través del primero y sirviendo de enlace entre sur y norte y viceversa por el costado occidental de la ciudad a trevés de la segunda.
En 2008 la glorieta adolecía de falta de adecuación estructural como eran vados en los andenes y señalización horizontal, razón por la cual la administración se encontraba en mora de dar cumplimiento a las disposiciones sobre accesibilidad.
A finales de ese año, Medellín Accesible solicitó judicialmente la protección de los derechos colectivos de todas las personas con discapacidad física y movilidad reducida al uso en condiciones autónomas y seguras de este espacio público, solicitud que fue acogida por el Juzgado 20 Administrativo del Circuito.
Arriba: Se observa en el conjunto fotográfico la situación estructural de los andenes circundantes de la glorieta en 2008, andenes los cuales no permitían el tránsito de personas con discapacidad física o con movilidad reducida, debido a que presentaban un considerable desnivel con respecto de la calzada y carecían de vados para salvar dicho desnivel.
Abajo: Sentencia proferida por el Juzgado 20 Administrativo de Medellín en la cual se le ordena a la adminstración municipal realizar las adecuaciones necesarias para conjurar la situación de inaccesibilidad a discapacitados que se presentaba en el sitio en referencia.